Después de una desagradable experiencia durante una presentación de trabajo, supe que no había interiorizado ni comprendido aún la importancia de decir “No sé”.
Hoy sé que decir “No sé” es también símbolo de humildad y que es válido no contar con una respuesta para todo. No pasa nada si no lo sabemos todo, si pasa algo cuando nos entercamos con una idea u opinión poco acertada. Es señal de poca inteligencia y falta de modestia.